Modelos religiosos y punitivos
Durante gran parte de la historia, las personas con discapacidad han sido objeto de discriminación y estigmatización. En muchos casos, se les consideraba castigados por los dioses o como resultado de pecados cometidos por ellos o sus familias. Estos modelos religiosos y punitivos veían la discapacidad como una consecuencia de la maldad o la falta de fe, y se creía que las personas con discapacidad merecían sufrir como resultado.
Este enfoque religioso y punitivo llevó a la marginación y la exclusión de las personas con discapacidad en la sociedad. Se les negaba el acceso a la educación, el empleo y otros derechos básicos. Además, se les consideraba una carga para sus familias y comunidades, lo que llevaba a su aislamiento y abandono.
Modelo médico
A medida que avanzaba la ciencia y la medicina, surgió un nuevo enfoque para comprender la discapacidad: el modelo médico. Este modelo veía la discapacidad como una enfermedad o una condición médica que debía ser tratada y curada. Se creía que las personas con discapacidad eran «defectuosas» y que su discapacidad era el resultado de una disfunción o anormalidad en su cuerpo o mente.
Bajo el modelo médico, las personas con discapacidad eran vistas como pacientes que necesitaban atención médica y rehabilitación. Se enfocaba en la corrección de la discapacidad a través de intervenciones médicas, como cirugías, terapias y medicamentos. Sin embargo, este enfoque no abordaba las barreras sociales y estructurales que limitaban la participación plena de las personas con discapacidad en la sociedad.
Modelo social
A medida que se reconocía la limitación del modelo médico, surgieron críticas y demandas de cambio. En la década de 1960, el movimiento de derechos civiles de las personas con discapacidad comenzó a ganar fuerza, impulsado por la lucha por la igualdad de derechos y la inclusión social. Este movimiento dio lugar al desarrollo del modelo social de discapacidad.
El modelo social ve la discapacidad como el resultado de las barreras y la discriminación que enfrentan las personas con discapacidad en la sociedad. En lugar de centrarse en la «deficiencia» de la persona, se centra en las barreras físicas, sociales y actitudinales que impiden su participación plena. Este enfoque reconoce que la discapacidad no es una condición inherente de la persona, sino una construcción social.
Bajo el modelo social, se busca eliminar las barreras y promover la inclusión y la igualdad de oportunidades para las personas con discapacidad. Esto implica cambios en la infraestructura física, la legislación y las actitudes sociales. Se enfoca en la accesibilidad, la participación y la autonomía de las personas con discapacidad.
Modelo biopsicosocial
A medida que se desarrollaba el modelo social, se reconocía la importancia de considerar no solo los factores sociales, sino también los factores biológicos y psicológicos en la experiencia de la discapacidad. Esto llevó al desarrollo del modelo biopsicosocial de discapacidad.
El modelo biopsicosocial reconoce que la discapacidad es el resultado de la interacción entre factores biológicos, psicológicos y sociales. Se reconoce que las personas con discapacidad tienen diferentes capacidades y necesidades, y que su experiencia de la discapacidad está influenciada por una variedad de factores.
Bajo el modelo biopsicosocial, se busca comprender y abordar la discapacidad de manera holística. Se reconoce la importancia de la atención médica y la rehabilitación, pero también se enfoca en la inclusión social, la igualdad de oportunidades y el empoderamiento de las personas con discapacidad.
Modelo de determinantes sociales
En los últimos años, ha surgido un enfoque aún más amplio para comprender la discapacidad: el modelo de determinantes sociales. Este modelo reconoce que la discapacidad no solo está influenciada por factores individuales, sino también por factores sociales, económicos y políticos más amplios.
El modelo de determinantes sociales ve la discapacidad como el resultado de desigualdades y injusticias en la sociedad. Reconoce que las personas con discapacidad enfrentan mayores barreras y desventajas en áreas como la educación, el empleo, la vivienda y la atención médica. Estas desigualdades están influenciadas por factores como la pobreza, la discriminación, la falta de acceso a servicios y la falta de políticas inclusivas.
Bajo el modelo de determinantes sociales, se busca abordar las desigualdades y las barreras estructurales que perpetúan la exclusión y la discriminación de las personas con discapacidad. Se enfoca en la promoción de la igualdad de oportunidades, la justicia social y la participación plena de las personas con discapacidad en la sociedad.
El modelo médico de discapacidad surgió como una forma de entender y abordar la discapacidad desde una perspectiva médica. Sin embargo, a medida que se reconocían las limitaciones de este enfoque, surgieron modelos alternativos que se centraban en las barreras sociales y estructurales que enfrentan las personas con discapacidad. Estos modelos, como el modelo social, el modelo biopsicosocial y el modelo de determinantes sociales, han llevado a un cambio en la forma en que se comprende y se aborda la discapacidad, promoviendo la inclusión y la igualdad de oportunidades para todas las personas.
Añadir comentario